Tal ve les deba algunas explicaciones. Hubo gente maravillosa que se mató catalogando rupestres. Entonces, cuando los ven 'deformados' se horrorizan. Pero mi descargo es que cuando ellos los dibujaron estaban en su mejor situación existencial posible, con salud, vitalidad, entusiasmo, alegría. No eran esos seres desprovistos, sucios y desnudos como los ilustran. Y hace 10.000, 5.000 años, esos dibujos estaban en su plenitud, en su esplendor, no desdibujados y carentes de significado, o con esos pobres significados que les atribuyen los arqueólogos.
Por otra parte, sí me importa el tehuelche actual, porque es portador de la genética de sus antepasados, que llega intacta al presente. Y no me importa si está o no insertado a esta cultura mamarracho que nos invadió, él sigue siendo un grande y es inconmensurable lo que podemos aprender de ellos.
Una riqueza oculta, que seguirá hacia el futuro en todo su esplendor.
Tehuelches
TSONEKAS, los gigantes de la Patagonia
domingo, 4 de junio de 2017
Sitio Estancia Las Marías
Mano de niño de 6 a 8 años sobre guanaco. Lámina 1.
Negativo de mano amarilla sobre guanaco. Sitio Estancia Las Marías, cercano a la Cueva de las Manos.
Todo lo que aquí se ve está en el dibujo.
Todo lo que aquí se ve está en el dibujo.
Sitio LMB II Cueva de las Manos
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